Durante la administración Obama-Biden, los Estados Unidos hicieron avances históricos hacia la igualdad social de la comunidad LGBTIQA+ . A continuación la Administración Trump-Pence se esforzó con creces en revertir el progreso realizado .
Para mi infortunio yo llegué a este país el año que Trump salió elegido como presidente. Me acuerdo de aquella noche electoral; estaba bebiéndome uno de esos margaritas que me ayudaban a digerir mis penas en el bar de abajo de mis apartamentos. Mi compañera de piso me acompañaba, y unos americanos que estaban en la mesa de al lado. Recuerdo dos cosas de aquel día: una, que el tío con el que hablaba llevaba grillz dorados en los dientes y no podía dejar de mirarlos, y dos, que todo el mundo estaba convencido de que Hillary iba a ganar; pero para nuestra sorpresa cuando estábamos pagando la cuenta, Donald Trump llevaba una gran ventaja sobre Clinton.
Actualmente con el gobierno de Biden se están dando pequeños pasos hacia el progreso en este tema. El pasado diciembre se promulgó un proyecto de ley que otorga protecciones federales al matrimonio entre personas del mismo sexo; pero ¿qué se cuece en la calle? ¿cómo vive la sociedad americana? Las noticias nos ofrecen informaciones contrapuestas; en diciembre precisamente, un perturbado mató a 5 personas en un club nocturno gay en Colorado.
A las dos semanas de establecerme en Austin, se celebraba el día del "Orgullo gay". Con mi inocencia de recién llegada, me calcé mis vaqueros cortos y mochila de fiesta para bajar a downtown a disfrutar de la "Gay Parade". Al entrar en Congress, una de las avenidas principales que atraviesan la ciudad desde el Capitolio, me llevé la sorpresa de que todo el circuito del desfile estaba vallado, y que las carrozas y diferentes participantes en el festival, salían ordenadamente unos detrás de otros, guardando la separación necesaria y sin hacer mucho bullicio. Bueno, pues "así son las cosas aquí" pensé, me apoyé en la barrera y me dispuse a observar el "fiestón" desde el otro lado, y entonces me percaté... Al lado mío había un grupo religioso cristiano, extremista añadiría yo, con carteles con mensajes de odio y no aceptación al colectivo, gritándoles impunemente, sin que nadie los detuviera. Por cierto, éstos son los mismos que se manifiestan con las leyes de aborto. Increíble, yo estaba fascinada ¨¿A qué siglo de la historia acabo de viajar?"
Estados Unidos es muy grande, puedes encontrarte muy diversas situaciones y comunidades a lo largo y ancho de este país. Conozco a Mike desde hace unos cuantos años. Cuando quedamos, hablamos sobre infinidad de temas, le encanta informarse sobre la situación política y social internacional; ¡siempre sabe más de cuestiones legales en España que yo! Es un apasionado de conocer las opiniones de los ciudadanos en los diferentes países que visita. Por eso le propuse grabar uno de nuestros episodios de podcast, en concreto dedicarlo a este tema tan debatible: la aceptación del colectivo LGBTIQA+ en esta sociedad.
Michael Papanicholas tiene 27 años, originario de Chicago, nos cuenta que salió del "closet" (salió del armario) completamente hace 13 meses. En nuestro episodio él relata como se ha sentido durante todo este proceso en su vida como estadounidense y residente en este país. "Hace 13 meses que salí del armario totalmente. Reconocí para los demás y para mí mismo que ya no estaba interesado sexualmente en las mujeres. Empecé a tener pensamientos homosexuales desde los 19 años, pero ha sido todo un proceso hasta que me he dado cuenta de que soy exclusivamente gay"
Verdaderamente, aunque nos vemos con relativa frecuencia, una vez al mes o cada dos meses, yo nunca había tenido la sensación de que Mike estuviera atravesando ese proceso en estos años. Sí que sabía que a veces quedaba con chicas y otras con chicos, pero verdaderamente nunca fue un tema de mi incumbencia, si era bisexual, gay o hetero, para mí; es Mike. Quedamos, hablamos de relaciones, de amores, de ligues, de política, de sociedad... pero sin etiquetar nada; aunque sí que es cierto que en el último año él ha compartido más sus experiencias gays. Un día cuando venía del trabajo, me comentó que alguien en su oficina había hecho un comentario homofóbico delante de el y le había dolido. En 2017 se trasladó a Austin por cuestiones laborales. Austin es popular por su apertura y aceptación en términos LGBTIQA+, una entre otras ciudades, porque Chicago, San Francisco, Nueva York, Philadelphia.... también lo son. De ésto nos habla Mike y de otros detalles más en el episodio.
Le pregunto "¿Lo has tenido fácil salir del closet? ¿cómo ha sido socialmente?
"Cuando era niño recuerdo escuchar muchos comentarios, insultos, chistes homofóbicos que ya no oigo. Ahora mismo, aunque todavía haya un grupo de personas que siga pensando así, yo no me siento discriminado para nada en mi vida cotidiana. Creo que socialmente ha habido una evolución hacia la aceptación en los últimos 10 años, pero para mí también ha sido algo interno, algo personal, mi propia aceptación. Con los años también me va importando menos lo que piensen los otros de mí, el ser juzgado"
nos cuenta Mike.
Hablamos precisamente de las escuelas y la educación que se está dando al respecto. Este año, en mi distrito escolar, los profesores nos hemos visto sorprendidos por una serie de lecciones que teníamos que enseñar por primera vez en las aulas sobre "Educación Sexual". El tema está candente, la orientación de las lecciones no se sabe si es la apropiada. Eso comenta Mike: "No sé si es idóneo hablar de masturbación a un niño de 7 años, o de orientación sexual, me parece inducir a los niños a pensar en determinados temas para los que no están todavía preparados. Yo me alegro de que nadie en Primaria me contara sobre estos temas. Sí que creo que en Middle School y Secundaria estaría bien que se tratara, sobre todo cuando empieza a despertarse la sexualidad y se tienen las primeras relaciones. Entonces sí que creo que se apreciarían jornadas informativas, para que no haya un sexo incorrecto o no se corran riesgos en las interacciones sexuales, hetero o homosexuales."
Ha vivido los últimos años a caballo entre Austin, Arizona y casi 2 años viajando por distintos países latinos, México, Colombia, Ecuador, República Dominicana... "En algunos países de América Central todavía hay mucha homofobia, por ejemplo, en Guatemala sólo un 20% de la población acepta el matrimonio igualitario. Me sorprendió el Caribe, están muy atrasados en eso. Uruguay, sin embargo, es un ejemplo, un modelo a seguir para América Latina. México, Chile, Brasil, también son más abiertos. Aquí en EEUU, la gente de pueblos pequeños y de campo suele ser más cerrada; las ciudades son más receptivos a la comunidad LGBTIQA+ ; de hecho en las grandes urbes hay barrios enteros de comunidad gay, como Chueca en Madrid, está Boystown en Chicago, Montrose en Houston... Por eso muchos gays que viven en el campo se trasladan a vivir a la ciudad, se sienten más cómodos aquí."
Por suerte para mi amigo, él dice no haberse sentido nunca víctima de discriminación o haberse encontrado en una situación violenta que viniera dada por su condición sexual. Sí que se escuchan comentarios aquí y allá. Nos cuenta que cuando era más joven recuerda a su propio padre hacer este tipo de apreciaciones con su terapeuta espiritual cristiano. En redes sociales, por supuesto, la gente hace y dice todo tipo de burradas al respecto, como con todo, pero en persona no ha tenido un enfrentamiento directo nunca con nadie.
A la hora de expandir su círculo de amistades y conocidos precisamente echó mano de las redes sociales.
"Instagram, bares, app de dating como Tinder, Bumble, Grindr. Las utilizo también cuando viajo, la gente gay creo que es mucho más sociable y acogedora, me ha sido más fácil hacer nuevas amistades dentro de la comunidad que en los círculos hetero. Nunca me he sentido en peligro en una cita o cuando he quedado con una nueva amistad. Eso sí, primero me informo bien de con quién quedo, investigo su instagram, sus amistades... Por eso ahora me siento raro si conozco a alguien orgánicamente en un bar, es más directo, pero no puedo cerciorarme de su historial".
Cuando nos despedimos Mike dice con una sonrisa en su cara "Ojalá hubiera salido antes del closet. Éste último año ha sido el más feliz de mi vida. Me siento pleno, he hecho muchísimas amistades nuevas, me siento con más autoconfianza, me siento más feliz. Cualquier edad es buena para salir del armario; además pienso que la sexualidad no es definitiva y atiende a diferentes etapas de la vida. Puede ocurrir que de pronto te sientas diferente a lo que has estado sintiendo durante años, y hay que estar abierto y ser sincero con un mismo para aceptarlo".
Si quieres escuchar la versión original de esta conversación que incluye muchos más detalles y matices, dale al link adjunto, episodio de podcast "LGBTIQA+ go!". Las palabras reproducidas en este artículo no son las literales de la conversación.
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